«Si te pierdo a ti, lo pierdo todo.» —Patch Cipriano.
«Eres mía, Ángel. Y no dejaré que nada cambie eso.» —Patch Cipriano.
—¡Vale! Me vestiré. Date la vuelta. Estoy en pijama. —
Un pijama que sólo consistía en
camiseta sin mangas y unos pantaloncitos:
una imagen que no quería que quedara grabada en la cabeza de Scott.
una imagen que no quería que quedara grabada en la cabeza de Scott.
Él sonrió.
—Soy un tío. Eso es como pedirle a un niño que no mire el mostrador
de los caramelos.
—Soy un tío. Eso es como pedirle a un niño que no mire el mostrador
de los caramelos.
«Entre pedir permiso y pedir perdón, opto por lo segundo. Patch Cipriano.
«La sinceridad es buena, pero también lo es la lealtad.» —Patch Cipriano.
«Sólo estoy seguro de una cosa. Haría lo que fuera por ti, incluso si eso
significara ir en contra de mis instintos o de mi naturaleza.
Dejaría todo lo que poseo, hasta mi alma, por ti.
Si eso no es amor... es lo mejor que puedo darte. Patch Cipriano.
significara ir en contra de mis instintos o de mi naturaleza.
Dejaría todo lo que poseo, hasta mi alma, por ti.
Si eso no es amor... es lo mejor que puedo darte. Patch Cipriano.
—Anoche lo pasé muy bien. Estoy oficialmente enamorada de tus sábanas
—¿Acaso es lo único de lo que estás enamorada?
—¿Acaso es lo único de lo que estás enamorada?
Una sonrisa se asomó a la mirada de Patch.
—Mi cama siempre estará encantada de recibirte.
—Mi cama siempre estará encantada de recibirte.
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